Tanto unos como otros, es decir, españoles de Andalucía y españoles de Asturias (el año que viene por estas fechas nos tocará a los españoles de Vascongadas), tienen la ocasión de hacer cambiar unas realidades regionales absolutamente desasosegantes y poco democráticas, sobre todo en Andalucía, donde el poder absoluto "sociata" ha llevado a una corrupción absoluta y, en los últimos tiempos, galopante.
D. Ferchu: En Asturias también tenemos una realidad "desasosegante". Mire, si no, la corruptela del caso Marea, el desastre del Centro Niemeyer, o los sobrecostes del superpuerto (aún no sé para qué diablos lo hicieron) de El Musel. A ver qué va a pasar hoy. Me temo que "más de lo mismo".
ResponderEliminarUn saludo, caballero.
Zas!!! En toda la boca
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