Hoy estamos en el
ecuador de la campaña electoral de las elecciones regionales vascas de 25 de
octubre, y hoy mismo tendremos encuestas mil de intención de voto; que, por
cierto, están bastantes desprestigiadas después del sonoro fracaso de los
vaticinios en las generales del 26-J.
Akí las cosas son aún más complicadas, porque si de cara a las
elecciones generales se barajan cuatro partidos (los dos habituales más los dos
emergentes), en las Vascongadas hay que añadir al menos dos partidos más, el
nacionalista burgués y el nacionalista heredero de eta-batasuna.
Así que el abanico se
complica y los pactos posteriores de cara a la formación del gobierno regional
son aún bastante difíciles de entrever, además, también, esta de trasfondo la
investidura de Rajoy, y el ya muy avanzado plazo de dos meses, que determinará
la convocatoria de las terceras elecciones generales en un año, salvo
investidura de don Marino “in extremis”.
Así que, amable lector,
¡relájese!: el otoño político será muy intenso en España, y la “abuela gruñona”
de nuestra patria se dejará notar, una vez más.
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