El besuqueo del pasado martes (07-02-12) del diputado de Eta-Batasuna-Amaiur por Navarra (¡sí!, ese con el que querían hacer la trampa para conseguir grupo parlamentario propio) y la ministra del PP, del gobierno del PP, Fátima Báñez, es la hipocresía personificada, un episodio más de la mentira y del enmascaramiento proetarra de esa gente; un gesto ante las cámaras y sólo para engañar a lo espectadores, porque no se han apeado de ninguna de sus convicciones, ni de sus pretensiones, ni de su lenguaje típicamente etarra, y si no que se lo pregunten al Ministro del Interior.
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