En alguna ocasión anterior ya hemos tratado aquí la cosa
esta de las romerías pro-vascuence, o sea, las cinco citas anuales de los
siempre, y desde siempre, con los 100.000 (supuestamente) hijos de San Sabino Policarpo.
La romería vizcaína de este año ha sido en Portugalete, con extensión a Sestao y Santurce, y se ha celebrado el
pasado finde, y como ya sabemos
todos, se trató una vez más de una simple
excusa pá la exaltación NaZionalista,
y como suele ser frecuente en esta región, para dar rienda suelta a la afición
de los triperos nacionalistas y, últimamente, sobre todo, de quienes ven una
magnífica excusa para hacer un gran botellón, un botellón king size, y lo que de ahí surja.
El resultado del Ibilaldia vizcaíno de 2013: 31 comas etílicos, y por lo demás … un gran
fracaso de asistencia, en modo alguno llegaron (nunca lo han conseguido) a los
100.000 asistentes, la imagen que les ponemos recoge que “centenares de persones se dieron cita …”, quizás fueron algo más
que unos cientos, quizás llegó a unos pocos miles, pero en modo alguno a 100.000 asistentes.
La cosa se celebró, como decimos, el domingo 26 de mayo, y la información en prensa del lunes 27 supuso la constatación
del fracaso: los parkings reservados en el BEC (Bilbao Exhibition Center) y en el Centro Comercial Ballonti permanecieron casi vacíos,
y la excusa de que “habrán venido en metro” es una auténtica falsedad: simplemente
la gente no acudió a la cita, fueron pocos los asistentes, y en la mayor parte
de los casos el interés no estuvo en la cosa del vascuence, o eusquera, sino en
la chufla, el botellón y, si acaso, en la cópula (pá quien (él o ella) se le arregló el día).
Ya ven (imagen de abajo, del sábado 25-5-13), de la previsión voluntarista a la realidad, un largo e insalvable trecho.
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