Si,
señores lectores, Juanjo, el de Durango, ha vuelto a hacer de las suyas, ha vuelto a meter la pata … basta con
que le pongan en el pleno algo que tenga que ver con la Guerra Civil entre
vascos (18 de julio de 1936 a 18 de junio de 1937) para que con su proverbial
ceguera política e incompetencia, ponga en evidencia a todo el PP y a todos los
esforzados militantes vascos de su partido.
Aún
peor que es la dirección provincial del PP de Vizcaya (cuyo Secretario General, por cierto, aspira a presidir la Diputación Foral en las próximas elecciones municipales) …. ¡le respalda!.
El
tipo parece tonto (o se lo hace) y sus adversarios de la corporación municipal
le tienen cogido el tranquillo, así que les resulta muy fácil hacerle caer en comportamientos descalificatorios.
No sabemos que hace el PP vasco (y el regional, y el
nacional) que no se desprende de este pesado fardo … el tal Juanjo parece una rueda de molino
que algunos tienen previsto colgarse al cuello para tirarse al río.
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