La televisión pública de Cataluña es un eficaz instrumento al servicio del NaZionalismo separatista regional, y no tiene ningún tipo de prejuicio a la hora de manipular o de utilizar métodos que deberían estar prohibidos para los demócratas, incluido aprovecharse de menores, de auténticos niños.
Niños de 12, 13 y 14 años al servicio de la propaganda política del separatismo oficialista, con expresiones tan zafias ("España tendrá que rendirse"), como la que se destaca en la portada de El Mundo, edición impresa de ayer.
Y ante tamaña barbaridad las opciones son dos: estar a favor del atentado contra la infancia, como hizo ayer mismo el partido del poder ("CiU ve 'muy pedagógico' el informativo que usó niños por la independencia") y suponemos que también su socio ERC, o en contra, solicitando la aplicación de la legislación que protege a los menores ("PSOE e IU animan a aplicar la Ley del Menor contra TV3 por utilizar a niños "), también se han pronunciado en sentido crítico sobre este auténtico atentado contra la infancia el PP, UPyD y Ciutadans.
En fin, los NaZis catalanes son gentes sin escrúpulos.
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