No
llevan nada más que unos pocos meses ocupando cargos públicos y el “trinque” se
empieza a destapar con toda su crudeza: empezaron “colando” a sus novios y
novias, o parejas, y otros familiares en los ayuntamientos con buenos sueldos,
empezando por la Colau y la Carmena.
Siguieron con la convocatoria de
oposiciones con el perfil predeterminado a favor de los suyos, esto es, con nombre y apellidos.
Y continúan con cutreces y
miserias como la del alcalde “podemita” de Zaragoza: compró con cargo al Ayuntamiento
el 18 de diciembre pasado (¿auto regalo de Navidad?) un bote de gomina, para
atusar su juvenil mata de cabello … y el muy miserable se quedó tan ancho.
Se acaba de descubrir la chapuza, la canallada a la ciudadanía y el carácter miserable y mezquino del alcalde "podemita" de Zaragoza; ¿y que pasará ahora?, ¿le echarán del partido por chorizo?, sería lo procedente en los adalides de la "nueva" política, casi tan limpia como el cabello del alcalde "podemita" maño; ¿o no le echarán sino, al contrario, le mantendrán en el cargo con todo tipo de parabienes?, esto sería "vieja" política, es decir, arropar y defender al chorizo simplemente ... porque es de los suyos (vamos, al viejo estilo que se imputa a varios líderes norteamericanos de defender a los aliados más canallas: "fulano es un hijo de puta, pero, ¡ojo!, ¡es NUESTRO hijo de puta!.
En esta misma linea argumental, ¿sera el alcalde "podemita" de Zaragoza "nuestro hijo de puta" de "Coleta Morada"?.
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