Hace unos días hablábamos de las posibles fechas de las próximas elecciones regionales en esta autonomía, que serán el próximo otoño, invierno o primavera; hay circunstancias claras que pueden obligar al lendaccary a convocarlas en cualquiera de esos periodos.
También hemos detallado el “roadmap” de Juanjete Ivarreche.
Hoy toca dar un paso más: ¿quién ganará las próximas elecciones regionales en la C. A. del País Vasco?.
La respuesta es evidente: ¡ganará quien la banda criminal Eta quiera que gane!.
Así de rotundo, así de sencillo y así de claro; no merece la pena devanarse los sesos buscando las razones por las que la banda decidirá que el próximo lendaccary sea uno próximo a ellos o uno contrario a ellos, la sinrazón de los criminales naZionalistas no nos permitirá realizar un análisis sensato, antes de su decisión, sobre los “cómos” y los “porqués” y el por qué ahora …
La gilipollez naZionalista de que “ETA no debe marcar la agenda”, en las múltiples variaciones que hemos conocido, tiene muy corto recorrido si nos paramos a pensar al margen de apriorismos ideológicos o de conveniencia, ¡claro que la banda marca la agenda!, es más, lo ha hecho siempre, y en lo que respecta a decidir el próximo lendaccary, si quiere, lo hará cuando quiera, como quiera y en la línea que quiera.
Parecerá una barrrrbaridad a algunos peneuvistas y asociados “meapilas”, pero un atentado concreto en la víspera del día de la votación puede decidir quien se vaya a vivir en los siguientes cuatro años al palacete vitoriano conocido por “Ajuria Enea”. N’est-ce pas?.
También hemos detallado el “roadmap” de Juanjete Ivarreche.
Hoy toca dar un paso más: ¿quién ganará las próximas elecciones regionales en la C. A. del País Vasco?.
La respuesta es evidente: ¡ganará quien la banda criminal Eta quiera que gane!.
Así de rotundo, así de sencillo y así de claro; no merece la pena devanarse los sesos buscando las razones por las que la banda decidirá que el próximo lendaccary sea uno próximo a ellos o uno contrario a ellos, la sinrazón de los criminales naZionalistas no nos permitirá realizar un análisis sensato, antes de su decisión, sobre los “cómos” y los “porqués” y el por qué ahora …
La gilipollez naZionalista de que “ETA no debe marcar la agenda”, en las múltiples variaciones que hemos conocido, tiene muy corto recorrido si nos paramos a pensar al margen de apriorismos ideológicos o de conveniencia, ¡claro que la banda marca la agenda!, es más, lo ha hecho siempre, y en lo que respecta a decidir el próximo lendaccary, si quiere, lo hará cuando quiera, como quiera y en la línea que quiera.
Parecerá una barrrrbaridad a algunos peneuvistas y asociados “meapilas”, pero un atentado concreto en la víspera del día de la votación puede decidir quien se vaya a vivir en los siguientes cuatro años al palacete vitoriano conocido por “Ajuria Enea”. N’est-ce pas?.
Pie de foto: De urna a urna y tiro (¡lagarto, lagarto!) porque me toca.
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