Ya sabemos que los españoles tenemos cosas más importantes en que ocuparnos, pero sigue siendo informativamente un punto de referencia el de las andanzas de los seis iniciales (y siete finales) diputados de Eta-Batasuna-“amaiur” en el Congreso; la última gilipollez suya es que no les gustan los pupitres en que, en defecto de acuerdo entre ellos, la Mesa de la institución ha colocado al personal adscrito al Grupo Mixto.Y a los luchadores del “comando parlamentario” de la izquierda averlache les han puesto en la última fila … en lo que ellos mismos han llamado “el gallinero”, con claras reminiscencias de las localidades más baratas en los cines de barrio y en los teatros de intrincados y alejados palcos de platea.
Aún siendo un tema menor, con caducidad inmediata, ya que lo importante ahora va a ser conocer el currículum, carácter, actitudes, aptitudes y competencia de los nuevos ministros, a nosotros nos parece que tiene cierta relevancia el constatar, una vez más, que los tarugos de boina (akí llamada “chapela”) a rosca, son incapaces de entenderse con nadie, ni para nada, y eso a pesar de que estos tipos tienen a 7 de los 18 miembros (¡bueno !, hay alguna “miembra” que diría la ex Aído) del Grupo Mixto … son incapaces del dialogo, la negociación y el acuerdo hasta para repartirse las sillas, y organizar cómo sentarse. Que … ¡manda güebos! (Trillo dixit).
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