Final de las coacciones: Auf wiedersehen! Herr Martínez

Parece que los futbolistas no vascos de nuestrrrro Athletic (recuerde el amable lector que Ferchu Llorente es riojano y que Javi Martínez es navarro) no se dejan sojuzgar por el NaCismo cutre de la junta directiva del club y de una parte (la más radical) de los aficionados; tanto una como otros han llegado a la descalificación personal de ambos jugadores (y de alguno más), con ánimo de coaccionarles, sólo porque desean negociar la renovación de sus contratos a precios de mercado y, alternativamente, entrar en ese mercado, donde es seguro que algún otro club, más inteligente, les pagará lo que se merecen.

Y pasó lo que tenía que ocurrir: el Bayern de Munich puso sobre la mesa los 40 millones de euros (6.655 millones de pesetas) de la cláusula de rescisión de Javi, y Javi se va al fútbol alemán; y como la directiva y los aficionados cafres sigan en sus trece, Llorente se irá dentro de nueve meses, y por 0 € (cero euros), porque concluye su contrato.

En nuestra opinión las claves son tres: no estamos en la arcadia feliz del gran joputa Sabino Arana, no se puede coaccionar a la gente y no se pueden poner puertas al campo.
De todas formas, "a futuro" (como dicen los seguidores del analfabestia Ivarreche), la cuestión es qué hacer con los 40 millones de euros; el presidente autonómico saliente (Pachiló) se planteaba este lunes que el Athletic de Bilbao debería destinar ese dinero (o la mayor parte) a la financiación del nuevo estadio San Mamés, aunque sólo sea para que esa "pasta gansa", llovida del cielo, permita prescindir de parte de la financiación pública.