Nos ha alegrado ver el buen ambiente (“talante” es una palabra ajada por el mal uso) que reinó entre el Presidente del Gobierno de la Nación y el Líder de la Oposición ayer en La Moncloa; lo decimos nosotros y también la generalidad de los medios informativos que estuvieron atentos a la cita; habrá consenso en los grandes asuntos de Estado, se llegará a pactos para la renovación de los órganos constitucionales cuyo mandato haya concluido; fluirá la información en ambos sentidos sobre materias de interés general …No diremos aquí ni una sola palabra que cuestiones este escenario, no recordaremos si antes ha habido desencuentros, dudas, desconfianza, incomprensiones o descalificaciones por encima de lo razonable. Queremos creer que todo esto es agua pasada, y que se inaugura un nuevo ciclo en el que el gran partido nacional (y sólo hay dos en España) que gobierne, lo haga contando con el otro, dejando en un segundo lugar a las minorías ramplonas, cutres y “comisionistas” que sólo dar su apoyo al mejor postor; o la España del siglo XXI la hacen los dos partidos que están llamados a sucederse, o si lo prefieren, a sustituirse en el Gobierno de la Nación … o haremos el ridículo en un escenario internacional tan competitivo en el que “perder comba” puede llevarnos al desastre. ¡Enhorabuena D. José Luis!, ¡enhorabuena D. Mariano!.
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