Este lunes el Vicepresidente del Gobierno de la Nación que tiene la responsabilidad de los asuntos autonómicos se desplazó a Vitoria, capital regional del País Vasco, para cerrar con el Presidente autonómico el traspaso de una de las competencias estatutarias pendientes; una de esas que los nuevos NaCis no querían acordar porque les venía bien (o al menos eso creían ellos) la estrategia de tensión permanente y, además, porque estaban a la espera de un momento de debilidad del Gobierno nacional para poner un precio exageradamente alto a la financiación del traspaso.
Pues bien, rota la estrategia NaCi por votación popular, ambos gobiernos se han puesto de acuerdo de una forma muy rápida, muy armónica y muy normal.
Ahora serán los técnicos quienes valoren el importe de la competencia a transferir; parece que será en torno a unos 300 millones de euros, muy lejos del "sablazo" NaCi de 450. Y, a partir de ese momento, estará residenciada en nuestra región la capacidad para decidir y desarrollar políticas activas de empleo, que no ha sido posible en casi 30 años por la cerrazón de los lejendaccarys NaCis.
No hay comentarios:
Publicar un comentario