La semana pasada ha sido pródiga en noticias sobre nuestras tropas combatientes en Afganistán. El miércoles un sargento fue herido en un ataque talibán. El jueves la Ministra Carmen Chacón, quitándole importancia a la cosa, dijo que “el soldado herido fue víctima de delincuentes comunes” (¡manda güebos!, Trillo dixit). El propio jueves (vean en la imagen el titular a cinco columnas de la portada de El Correo del día siguiente) la testaruda realidad cerró la boca con un soplamocos a la incontinente e incompetente ministra: en una acción de guerra, tras seis horas de duro combate, nuestros soldados se cargaron a 13 terroristas talibanes (con ayuda de apoyo aéreo italiano). Y el sábado ZP en el inicio del curso político, nos anunció que pretende enviar 200 soldados españoles más a Afganistán. Sin embargo el gobierno de Kabul dice que no son necesarios más soldados españoles, que bastaría con que los que hay allí se dedicaran sin engaños ni tapujos a lo que tienen que hacer, que es perseguir y combatir al talibán, no esperar a ser atacados para, después, y desde una posición defensiva, disparar unos cuantos “tiritos” (ocasionalmente, como el pasado jueves, muchos).Nuestro admirado Alfredo García Francés (magnífico blog el suyo) en su visita del viernes nos recordó la frase de D. Pepe Bono que usamos como titular y nos ha dado pie para este comentario (¡gracias D. Alfredo!).
España tiene en suelo afgano un contingente de 790 soldados, a los que hay que sumar desde junio los 450 del llamado (otro eufemismo mentiroso de ZP) “Batallón Electoral” … ahora nos dice el Sr. Rodríguez Zapatero que en breve va a enviar a la guerra a 200 soldados españoles más.
Hasta el jueves la frase de Bono se había llevado a la práctica punto por punto, como si los soldados españoles “prefirieran morir antes que matar”: habíamos tenido seis soldados muertos y sólo habíamos causado tres bajas al enemigo; el jueves, sin embargo, nos cargamos a trece terroristas talibanes, con lo que ha cambiado el signo del saldo, ¡quizás Bono se lo tome como una insubordinación, o como una afrenta personal!, ¡mira que haber matado a 13 enemigos sin haber muerto ninguno de nosotros!.
Pero la cosa no queda aquí: por un lado, President Obama nos pide que enviemos más soldados a Afganistán, y por otro, el gobierno afgano lo que nos reclama es que nuestros soldados dejen de “jugar a la guerra de la señorita Pepis”, que no otra cosa es el otro gran eufemismo mentiroso de ZP: tropas en “misión de paz”, por cierto, armadas hasta los dientes y bajo el fuego enemigo. ¿Qué nuevo engaño estarán preparando la Chacón y el ZP para “vendernos” su decisión?, sea la que fuere, pero, como todas, improvisada y con ánimo de contentar a todos … incluso a los talibanes, aunque sólo sea para que nadie diga que nos ponemos en riesgo de otro 11-M, porque si tuvimos un 11-M sin que disparáramos un solo tiro en Irak … ahora que estamos matando talibanes en Afganistán, ¿qué hará Bin Laden?, que ya sabemos que tiene Al Andalus como objetivo en sus planes expansionistas, para borrar el legado que va desde Don Pelayo a los Reyes Católicos, es decir, casi ocho siglos de lucha para expulsar del suelo patrio al moro que nos invadió en el 711.
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