El nuevo Lehendakari y la Erchaina: el dedo en la llaga

No cabe duda de que el nuevo Lehendakari, D. Francisco Javier “Pachi” López Álvarez, tiene las ideas claras, y sabe dónde poner el acento. Este domingo lo ha hecho en el homenaje a los 15 policías autonómicos vascos asesinados por la banda criminal nacionalista vasca: “«Está cerca el día en el que no ocultaréis a vuestros vecinos que sois ertzainas»”.
Se trataba de un secreto a voces, que desde ahora ya no es un secreto, desde ningún punto de vista, gracias a este titular de la portada de ayer lunes en El Correo; es más, ha dejado de ser políticamente incorrecto, porque sólo lo era desde la perspectiva NaCi.
A los NaZionalistas siempre les ha molestado reconocer una realidad tan evidente como la enunciada por el Lehendakari López, porque rompía el mito, la falsedad naZionalista, el engaño sobre el que ha pretendido mantener el origen de nuestrrrra policía autonómica: que era un cuerpo no represivo, querido y admirado por la ciudadanía, cuya recuperación demandaba la sociedad vasca toda, y por eso, su función sería tremendamente bien acogida, es más, en aquellos años de mediados de los ’80, el NaCismo vasco institucional decía que sería una policía como la inglesa, como los célebres “bobies” , que patrullaría sin necesidad de armas, ayudando a los niños y recibiendo los parabienes de las ancianas … y que, por ello, podría entrar en todos los pueblos vascos y mezclarse con la gente, cosa impensable en la Guardia Civil, por lo que su efectividad contraterrorista sería excelsa, ¡vamos la arcadia feliz policial!.
Y la realidad ha sido muy otra, nuestrrrra policía no puede entrar en ningún pueblo ni en ningún ambiente averchale, menos incluso que la Guardia Civil, porque además sus agentes (sobre todo los de extracción peneuvista) carecen de valor para hacerlo (no es que sean unos cobardes, simplemente no tienen valor).
Y es que, claro, el NaZionalismo peneuvista (y el resto también) después de tantos años envenenando a la gente con malas artes sobre la policía (o las policías), ¿cómo iba a pretender que los suyos más radicales, que los sabinianos de las pistolas, fueran a aceptar otra policía, más policía, a pesar de que a las “comisarias” se les llame “erchain-echea”, o que quienes dan palos en las manifas se llamen, en lugar de “los grises”, algo parecido, “los negros” (o sea “los belchas”).
¡Cuanta falsedad NaZionalista en la refundación moderna de la policía autonómica vasca!.
Por cierto, una de las cosas que el Lehendakari López podría haber dicho en sustitución de su frase del domingo, o a continuación de ella, es que “está cerca el día en que podréis volver a vivir en esta región, en lugar de en las comunidades autónomas vecinas, podréis dejar de vivir en Castro, en Laredo, en Miranda o en los pueblos próximos de La Rioja, aunque allí vuestros vecinos no sean de Eta-Batasuna”.
¡A ver si lo logras, Lehendakari!.