Comprenderán que es una broma, o varias encadenadas, porque las imágenes reflejan algo en lo que nadie decente desearía convertirse nunca: un tiparraco obeso que pasó (La Moncloa mediante) de mediocre abogado laboralista de provincias a un repugnante ricacho con una enorme fortuna cuyo origen no se conoce bien, y cuya cuantía tampoco; a pesar de lo cual todavía sigue prodigándose en actos de su partido (¿socialista?) y, sobre todo, en las campañas electorales, dando (o pretendiéndolo) lecciones de honestidad ... él que dejó a muchos hombres de confianza de sus gobiernos (ministros incluidos) al pie de los caballos, por no asumir sus responsabilidades (cosa que, por cierto, sí hizo "la" Tatcher en los sucesos de Gibraltar), él a forrarse y su gente a la cárcel; pero, "pelillos al mar", que el tiempo todo lo cura, y en su caso, la desmemoria selectiva histórica lo entierra. Y ya puestos a "echar los pelillos al mar", qué mejor que desde un magnífico yate, bronceado, en traje de baño de diseño, casi tipo tanga, con un magnífico veguero en los morros y con una "churri" (ajada ya, como él mismo), dándole cremita en la espalda. ¡Este hombre cada día se parece más, y en más cosas, a Jesús Gil .... y Gil!
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1 comentario:
Feliz Año Nuevo, Bilbaíno.
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