
Tampoco es un signo de “moderación” que el PNV, y su gobierno de Vitoria, no encabecen acciones claras contra la banda criminal nacionalista y su entramado económico y social de apoyo; es evidente que no quieren acabar con la banda, los réditos que le reporta la existencia de una criminalidad nacionalista que “tira” hacia la independencia (proyecto común y compartido de todo el nacionalismo) les vienen francamente bien: el decidido apoyo del PNV y del gobierno regional a los condenados en el Sumario 18/98 es una clara muestra de esto que decimos, como también equiparar sentencias judiciales y actividad terrorista.
El virus del extremismo, de la radicalidad y de la violencia lo llevan los aranistas en los genes; las fotos del militante nacionalista, que además ostenta un cargo de representación institucional del PNV en Bilbao (Consejo de Distrito del Casco Viejo), fotos “en acción”, que reproducimos en este post son muy elocuentes: el fatxa este, de cuyo nombre no queremos acordarnos (pero lo tiene el amable lector en las hemerotecas), es lo de menos, lo de más es que es un “hombre de confianza” del PNV; trabajó en el Departamento de Interior, es un “hombre del partido” y el PNV le tiene encomendado un puesto de libre designación en el organigrama del Ayuntamiento de Bilbao, donde le ha mantenido a pesar de protagonizar una de las más vergonzosas agresiones que hemos visto en la Villa en los últimos años.
¿Qué pasó?, pues mui sensillo: la grey nacionalista que vitoreaba al Lendacary Ibarreche cuando fue a prestar declaración como imputado en un delito, grey en la que había, por mitades, cargos institucionales muy bien remunerados recién llegados en su coche

Para nosotros el individuo es solamente el animal que representa al nacionalismo … de rostro "humano".
Pues, ¡joér, Ferchu!, ¿cómo serán lo demás?.
1 comentario:
Pues si estos son los buenos da miedo pensar como serán los malos, pero... a ver si va a resultar que son los mismos?
Publicar un comentario