En la edición impresa de El Correo de ayer vemos la siguiente noticia en páginas interiores (con la llamada en portada que utilizamos como imagen del post):"Fiscalidad vasca
Basagoiti empieza a perder el pulso ante sus 'vecinos' del PP opuestos al Concierto
Los populares de Cantabria, La Rioja y Castilla y León se alían contra el blindaje".
Basagoiti empieza a perder el pulso ante sus 'vecinos' del PP opuestos al Concierto
Los populares de Cantabria, La Rioja y Castilla y León se alían contra el blindaje".
Alguna reflexiones a vuelapluma:
Desde que los argumentos relativos a la foralidad que manejó el PP en su Recurso de Inconstitucionalidad contra la Ley de Territorios Históricos fueron desestimados por el Tribunal Constitucional, debió revisar su posición sobre este asunto; bueno, en realidad, debió establecer una posición, porque nunca lo ha hecho seriamente, al margen de la consigna de buscar una raíz histórica de “lo vasco” con anterioridad al discurso antiespañol y carca de Sabino Arana, que tiene poco más de cien años de recorrido.
Y si no lo han hecho personas con mayor fuste intelectual y capacidad política que Antoñito Basagoiti y su benefactora tía, Ascensión Pastor, no lo esperen Vds. ahora.
Lo de apoyar el blindaje del Concierto en el momento en que PNV utiliza esa excusa para chantajear al Gobierno de España y vender muy caros, en millones de euros y en contrapartidas políticas, el apoyo sabiniano a los presupuestos generales del Estado, es una torpeza sin límites; porque sólo desde una torpeza sin límites y desde la más supina incapacidad intelectual y política, es posible imaginar que no haya encontrado motivos más que razonables para explicar la oposición al “trágala” de los chicos del PNV, que estando, como están, en su momento de mayor debilidad, siguen sacando tajada, y cada cada día mayor … en parte gracias al Basagoiti.
En el debe de este líder de pacotilla están: la descalificación a los compañeros de Madrid (“que se presenten ellos”); la deslealtad en Grupo Parlamentario Popular en el Congreso de los Diputados, rompiendo la disciplina de voto; el intento de acallar la libertad de expresión de los compañeros del PP de La Rioja, Cantabria y Castilla-León; la incapacidad para valorar objetivamente lo que (en caso de conflicto) se juega el PP en este envite, nada menos que los gobiernos regionales en esas tres Comunidades; el recurso al mensaje victimista (al estilo peneuviano), haciendo ver que habrá próxima debacle electoral del PP vasco, que será sólo la debacle de Basagoiti (como ya hizo en el Ayuntamiento de Bilbao), que la debacle estará motivada por su irrelevante posición (que es absolutamente irrelevante) no atendida sobre el blindaje.
Si Basagoiti tiene un mínimo de dignidad y se siente desautorizado (cosa que ha reconocido públicamente) debería tener la decencia política de presentar la dimisión como parlamentario y dejar la dirección del PP vasco. Y si Basagoiti carece de este valor … Rajoy tendrá que hacer lo necesario para impedir que este tío le dinamite el partido en el País Vasco y en la mitad norte de España.
Y si no lo han hecho personas con mayor fuste intelectual y capacidad política que Antoñito Basagoiti y su benefactora tía, Ascensión Pastor, no lo esperen Vds. ahora.
Lo de apoyar el blindaje del Concierto en el momento en que PNV utiliza esa excusa para chantajear al Gobierno de España y vender muy caros, en millones de euros y en contrapartidas políticas, el apoyo sabiniano a los presupuestos generales del Estado, es una torpeza sin límites; porque sólo desde una torpeza sin límites y desde la más supina incapacidad intelectual y política, es posible imaginar que no haya encontrado motivos más que razonables para explicar la oposición al “trágala” de los chicos del PNV, que estando, como están, en su momento de mayor debilidad, siguen sacando tajada, y cada cada día mayor … en parte gracias al Basagoiti.
En el debe de este líder de pacotilla están: la descalificación a los compañeros de Madrid (“que se presenten ellos”); la deslealtad en Grupo Parlamentario Popular en el Congreso de los Diputados, rompiendo la disciplina de voto; el intento de acallar la libertad de expresión de los compañeros del PP de La Rioja, Cantabria y Castilla-León; la incapacidad para valorar objetivamente lo que (en caso de conflicto) se juega el PP en este envite, nada menos que los gobiernos regionales en esas tres Comunidades; el recurso al mensaje victimista (al estilo peneuviano), haciendo ver que habrá próxima debacle electoral del PP vasco, que será sólo la debacle de Basagoiti (como ya hizo en el Ayuntamiento de Bilbao), que la debacle estará motivada por su irrelevante posición (que es absolutamente irrelevante) no atendida sobre el blindaje.
Si Basagoiti tiene un mínimo de dignidad y se siente desautorizado (cosa que ha reconocido públicamente) debería tener la decencia política de presentar la dimisión como parlamentario y dejar la dirección del PP vasco. Y si Basagoiti carece de este valor … Rajoy tendrá que hacer lo necesario para impedir que este tío le dinamite el partido en el País Vasco y en la mitad norte de España.
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